lunes, 23 de abril de 2012

...porque TE QUIERO (L)


Cuando el último verano pensé que sería el último paseo por la playa contigo, la última carrera que daríamos juntos, el último baño a la orilla del mar... me equivoqué al pensar cuál sería el motivo.

Jamás imaginé la posibilidad de que este día llegase tan pronto. Jamás pensé que sería ésa la razón...

Sabía que ese momento algún día llegaría...pero no sé si estoy preparada para dejarte marchar...

No sé si estoy dispuesta a admitir, que ya no volveremos a volar juntos... esos momentos en que nos convertíamos en uno... un único pensamiento, un único deseo: VOLAR... (*)

Momentos que han llenado mi vida de energía, que me daban la vida y me daban fuerzas para seguir adelante, frente a toda barrera, frente al viento, frente a la marea. Sensaciones mágicas...dejarnos llevar por el viento, sin pensar en nada más, tan sólo sentir... sentir la brisa acariciándote en la cara, la velocidad, la conexión entre caballo y jinete... sentir que el mundo se para a tu alrededor y sólo vuelas...

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Ojalá hubiésemos podido repetirlo más veces. Y me da rabia no haber estado más años contigo, y no haberte visto crecer... Pero aún así, en tan poco tiempo me has dado tantas cosas... (L)

Mucho más de lo que me pueda aportar cualquier persona jamás...porque un caballo, no es simplemente un caballo...un caballo son muchas más cosas...son sentimientos, y fidelidad...alguien que siempre está ahi y no te abandona...alguien que con una mirada de complicidad te lo dice todo, y que jamás te mentiría, jamás te haría daño... una persona jamás podrá darte lo que te aporta un caballo, porque es algo ÚNICO, algo ESPECIAL, algo...MARAVILLOSO.

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Y quedará en mi corazón para SIEMPRE.

TE QUIERO ULISES (L)

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viernes, 13 de abril de 2012

Palabras olvidadas en el aire...


Palabras, palabras y palabras... ¡Qué bonito queda siempre todo con bonitas palabras! Dulces piropos y promesas que quedan abandonados y olvidados en el aire...porque al final son sólo eso, palabras...y por lo visto, hoy en día, las palabras han perdido su valor...

Para conocer a una persona no hacen falta palabras, ni conversaciones, conoces a una persona a través de los actos que realiza, de cómo se comporta. Las acciones son las que hacen ver cómo somos en realidad. Sobre todo las acciones en momentos difíciles, o momentos importantes para una persona. momentos que deciden tu vida y que te hacen ver de quién estás rodeada en realidad, y de quién no... Momentos que hacen que entiendas y compruebes quién se molesta en comprenderte, quién renunciaría a lo que sea por sacarte una sonrisa, quién realmente te apoya con tan sólo un abrazo sin saber qué decir, pero sin marcharse, sin acobardarse, sin quitarse del medio. Personas que ante todo deciden permanecer de pie contra la marea y defender sus pensamientos, defender lo que son, lo que quieren y en lo que creen; defenderse a ellos mismos, sin defraudarse, sin olvidarse, sin permitir que un acto estúpido les haga sentirse mal el resto de sus vidas. Personas, que ante todo mantienen su palabra y no se acobardan, que sacan valor para luchar por lo que les importa, y que al fin y al cabo te demuestran, que su palabra no es tan sólo una palabra...demuestran con sus actos que en su palabra sí que puedes confiar...

¡¡Estoy HARTA!!

Ya está bien: ¡estoy HARTA! Harta de falsedades, de hipocresías, harta de que la gente te mienta, te engañe, te robe tu sonrisa. Estoy harta de echarle cuenta a personas que luego no moverán el culo por mí. Harta de darme chocazos contra la pared una y otra vez y de ser tan gilipollas de volver a enfrentarme a ella, como si me gustase sufrir. Harta de caer una y otra vez en la misma trampa. De rendirme a alguien infinitas veces aunque sepa que no para de hacerme daño y que no se lo merece. Harta de dejar que me hagan llorar. Harta de llevarme palos e ir en busca de otros.

Estoy harta de que en un sólo día pasen tantas cosas. Harta de que en tan sólo una tarde llore, ría, grite, sonría, me cabree y vuelva a llorar. Estoy harta de ser una montaña rusa, de mi día a día lleno de altibajos. Harta de tratar de ser positiva y que el mundo me quite las ganas. Harta de luchar contra la marea y pretender ser fuerte cuando mis brazos están ya tan cansados. Harta de ir recogiendo los pedacitos de mi corazón aun sabiendo que no podré curarlo.

Estoy HARTA de TODO y de TODOS. De vivir tantas situaciones, tan diferentes. Creo que a veces incluso preferiría tener casi una vida aburrida antes que esto. Renunciar a vivir aventuras con tal de evitar este sufrimiento. Creo que incluso renunciaría a todo y mandaría todo a la mierda si supiese que no me iba a arrepentir a los cinco minutos. Odio ser adicta a vivir aventuras. Odio esta impotencia de no aprender por muchos palos que reciba. Odio saber que volveré a intentarlo, que volveré a caer, volveré a confiar con la esperanza de que me dure la sonrisa. Y odio saber que no podré evitarlo aun sabiendo que supone volver a sufrir.

En realidad tampoco pido tanto... Pido vivir una vida normal, en la que haya risas y tal vez alguna tristeza, en la que no me estrese cada cinco minutos o en la que dejen de ocurrir tantas cosas en tan poco espacio de tiempo. Pido tan sólo un poquito de tranquilidad, de paz, un permiso para relajarme un poco y que mi corazón se recupere de tanto sobresalto. Amo las montañas rusas, desde siempre, y en cierto modo me parecía divertido que mi carácter fuese así, tan cambiante; porque significaba que aunque me enfadase o me pusiera triste con mucha facilidad, también me alegraría y lo olvidaría muy fácilmente. Pero todo el mundo sabe, que si te tiras mucho tiempo subido a la montaña rusa sin bajarte, sin descanso, una y otra vez, llega un momento en que comienzas a marearte...Comienzas a pasarlo mal y comienzas a querer bajarte. Es entonces cuando todo tu cuerpo se revuelve, y comienza a vivir de golpe todas las consecuencias de haber estado tanto tiempo manteniendo toda esa intensidad en tu vida. Y ese malestar, aunque te bajes, tarda tiempo en quitarse, tardas tiempo en restablecerte y volver a estar preparada para seguir de pie y afrontar lo que te venga... Lo peor es, llegar a esa situación, de sentirte mal y notar cómo lo paga tu cuerpo, y aun así no poder bajarte, porque algo te lo impide, porque tu vida ya ha cogido esa inercia y no se sabe cómo pararla... ¿Qué haces entonces? ¿Cómo consigues que dejen de pasar tantas y tantas cosas, tantas y tantas emociones y sucesos que llenan de altibajos tu día a día? ¿Cómo le pides un pause? ¡Que alguien me enseñe cuál es el botón! ¡Cómo narices salgo de esta espiral! Esta interminable tortura de momentos y problemas y más momentos y más problemas....

Y lo peor, ¿qué pasa si no consigues pararlo? ¿si todo esto continúa y va destruyendo tu cuerpo poco a poco? ¿Hasta cuándo tendré fuerzas? ¿Hasta cuándo tengo que aguantar?...

miércoles, 11 de abril de 2012

Un día te das cuenta...


Un día te das cuenta de que personas que creías conocer te han sorprendido, se comportan de manera distinta, que algo ha cambiado. Ese día, además, te empiezas a dar cuenta de las falsas expectativas creadas, de las ilusiones, del cariño…y te das cuenta de que todo eso ahora pierde sentido. Y entonces, aparece en tu cabeza esa vocecita de “Te lo dije”…

Comienzas a plantearte cuál fue el error. Si no supiste entenderlas, si no supiste mostrarte…o quizás si te mostraste demasiado…muestras tus debilidades a las personas, lo das todo de ti, sin pensar que tal vez, esa persona, más tarde lo utilice en tu contra; o quizás no en tu contra, pero sí para su provecho… Porque al fin y al cabo, la vida te demuestra una y otra vez que en la humanidad ya no hay bondad, ni buena fe, ni transparencia…eso se extinguió hace mucho… Ahora cada persona piensa tan sólo en sus propios intereses. Olvidan los sentimientos, prefieren mirar hacia otro lado. Personas que se convierten en individuos cada vez más insensibilizados que no dudarán en pisotearte si consiguen algo a cambio. No van a dudar en traicionarte, o en mentirte, porque eso ya no importa, sólo importa el fin, conseguir lo que desean, no los medios.

Entonces es cuando piensas, ¿y qué se supone que debo hacer en este mundo cada vez más cruel? ¿Debo convertirme en otro individuo insensible? ¿En otra de las muchas personas falsas que hoy en día copan el mundo? ¿Cómo pueden vivir así? ¿En serio no les duele? ¿No les afecta? ¿Nada? … Me cuesta creer que realmente sea tan fácil mirar hacia otro lado; pisotear, mentir y traicionar sin más, sólo por conseguir tu fin. Me cuesta creer que realmente sus conciencias no les adviertan, que no queden atisbos de bondad en alguna parte de su insensible corazón… O quizás, es que soy yo la rara. Quizás, soy yo la que no entiende esta sociedad, la que nunca la ha entendido, la que siempre se ha negado a participar en ese juego… Quizás por eso, hay tantos momentos en que te sientes extraña, o apartada, porque tú no quisiste jugar, y los demás se limitan a mirarte raro, extrañados…pero muy pocas veces se preguntarán el por qué, muy pocas veces se molestarán en conocerte. Quizás, es cierto que el camino más fácil es hablar sin conocer, y no dejar que nada te afecte, como una barrera para que nada ni nadie pueda hacerte daño…

A lo mejor yo siempre me empeño en ir por el camino difícil de la vida… o simplemente, no soy como ellos, no me divierte hacer daño, no me divierte pisotear, no me divierte crear falsas expectativas, no me divierte engañar… Quizás, simplemente, me niego a ponerme un caparazón y dejar de ser YO; porque, en el fondo, si nadie lo hiciese, si nadie tuviese miedo, nadie necesitaría dejar de ser ellos mismos… Nadie necesitaría CAMBIAR. 


martes, 10 de abril de 2012

Momentos que se quedan grabados dentro de ti...



"Mi teoría es la de los momentos. La vida, son momentos impactantes. Esos momentos se quedan grabados dentro de ti, y son los que nos convierten en lo que somos. Pero, ¿y si un día no lograras recordar ninguno?"

Cada momento que vives, cada instante; cada mirada o cada olor. Cada sabor, cada beso, cada caricia, cada risa; cada momento de felicidad o de tristeza... Cada segundo, por muy insignificante que te parezca, se queda grabado dentro de ti, en lo más profundo, construyendo lo que eres, construyendo tu alma. Ríes, lloras, sientes...y eres especial gracias a cada momento vivido, cada experiencia. 

La vida te cambia en tan sólo un instante, sin darte cuenta. De repente ocurre algo en tu vida que lo cambia todo, o tan sólo una parte de ti, pero ha logrado transformar tu rutina. Momentos que se suceden unos tras otros vertiginosamente, hasta que llega un instante, un segundo, en que te paras y piensas, y te das cuenta de lo importante que ha sido ese momento para ti, de todo lo que te ha aportado. Te vas llenando de vivencias, algunas buenas y otras malas. Pero todas ellas forman ya parte de tu vida, de tu personalidad, de TI. Todos esos momentos hacen que seas TU. Y sobre todo, te hacen sentir, y seguramente, la mayoría de ellos, te hacen SONREÍR. 




...Días mágicos que te hacen soñar...Momentos que se quedan grabados dentro de ti... **

viernes, 6 de abril de 2012

Hoy, se acabó la pesadilla, o al menos eso parece...


De nuevo todo vuelve a estar completo, todo vuelve a estar en su sitio No como una herida que se cura, sino como si nunca hubiese existido esa herida. Como si nunca hubiese ocurrido. De nuevo esa sensación de que ahora todo es como debe ser. Esa sensación de dejar que la vida siga su cauce, de no forzar las cosas, de dejarse llevar… Las casualidades no hay que buscarlas, las casualidades suceden. De repente, cuando menos las esperas. Tal vez incluso cuando ya pensabas que jamás ocurrirían, que igual te equivocaste, que igual no existen las casualidades… Justo en ese momento aparecen, suceden, salen de la nada como si hubiesen estado esperando ansiosas el momento perfecto. Y entonces se para el tiempo, se olvida el pasado, y el puzle se vuelve a completar… Cada pieza en su sitio, cada color en su lugar. Tal vez piezas renovadas, porque puede que ahora brillen más, pero mismas piezas en su esencia; mismo puzle. Piezas que encajan en el mismo lugar. Piezas hechas a medida… que necesitan de la otra para sentirse completa…piezas que, ahora, están donde deben de estar, en su lugar. Y parece que nunca han estado separadas, parece que el tiempo no ha pasado. Como si llevasen toda la vida…con esa naturalidad…de que han sido creadas para estar juntas…lo sé.

Hoy, se acabó la pesadilla, o al menos eso parece. Como cuando te despiertas y respiras hondo, porque sabes que ya pasó, que no te volverá a atrapar. Como despertar y sentir que eso no ha ocurrido, y sigues viviendo tu vida, la misma que tenías antes de vivir esa pesadilla, tu vida de verdad.

Hoy, despierto de esa pesadilla… ¿será verdad? ¿será un sueño? Espero que no, y espero, sobre todo, que dure.

miércoles, 4 de abril de 2012

Se buscan personas con corazón


Se buscan personas que tengan corazón. Personas que sepan lo que son los sentimientos, que no  intenten ocultarlos. Se buscan personas que no se acobarden, que se dejen guiar por esos sentimientos y luchen. Personas que acepten sus miedos y que utilicen su cabeza para superarlos, para superarse, para saber escuchar, para saber sentir.

Se buscan personas que sepan lo que es la humildad, que entiendan el significado del amor, que tengan valor para ser sinceros. Se buscan personas honestas, personas que tan sólo entiendan por la palabra orgullo defender a los suyos y no darles la espalda. Que no nieguen las cosas, que cumplan su palabra. Personas que mantengan su honor y no utilicen dicha palabra como excusa para hacerse el chulo, porque no es lo mismo.

Se buscan personas que le den más importancia a una sonrisa que a un estúpido enfado. Que busquen la felicidad y no el rencor. Personas que sepan poner una sonrisa en vez de empeñarse en vivir en la oscuridad. Personas que quieran un mundo feliz y sepan que eso no se consigue destruyéndolo. Personas que se den cuenta de lo seria que es ya de por si la humanidad, que se den cuenta de que falta poner color en las vidas de las personas y que estén dispuestas a aportarlo.

Se buscan personas que no sientan la necesidad de fingir. Que se acepten y acepten a los demás. Personas que no se dejen influenciar por nadie. Se buscan personas que no se conformen con un sueño a medias, sino que luchen por un sueño completo. Personas que se antepongan a las dificultades. Que se dejen llevar por los sentimientos y no por los malos pensamientos. Se buscan personas que no dejen marchar una oportunidad de ser felices sólo por orgullo.

Pero en realidad, cada vez queda menos donde buscar, porque cada vez existen menos personas así…personas que olvidaron su corazón…

Mucha GENTE, ninguna PERSONA


Vivimos en un mundo cada vez más injusto. Sociedad acabada donde ya no importa el corazón ni las personas. Sociedad donde a veces importa más el quedar bien. La falsedad, el aparentar que somos felices sólo para que los demás no puedan herirte. Esa tentación de burlarte del otro sólo para sentirte bien contigo mismo. Ese sentimiento que saca lo más cruel del ser humano. Sociedades de personas desencantadas de este mundo, que han perdido la felicidad y se limitan a no buscarla. Personas que ya no son personas, solo borregos; borregos de esta sociedad que nos imponen desde chicos.

De pequeña te enseñan cuentos, películas y fantasías. Te enseñan a soñar, a querer vivir en un mundo feliz, a perseguir tus sueños y tus deseos más profundos, a que no hay que rendirse nunca y que lo más importante es respetar y no hacer daño a la gente. Te hacen creer que la vida es de color de rosa, y que algún día, si has sido buena persona, lograrás alcanzar tus metas y tu esfuerzo habrá sido recompensado. Cuentos y más cuentos que traen implicados los valores de esta sociedad. Una sociedad que según creces se va volviendo gris y pierde el color que de pequeña creías ver… Valores como la competencia, la avaricia, la ambición…sentimientos que sacan lo peor del ser humano. Pero parece que eso en esta sociedad no importa. Ya no importa ser un ser humano, ser una persona, sentir…al contrario, eso te hace débil. Ahora lo único q importa es tener poder y parecer feliz (tan solo parecerlo), lo demás no importa.

Esa obsesión por aparentar que eres alguien, por parecer feliz, mientras por dentro en realidad no lo sientes. Sociedad en la que cada vez estamos más rodeados de GENTE, y en la que, a la vez, nos sentimos más SOLOS. Porque ya tan sólo hay gente, mucha gente, pero ninguna PERSONA…sólo GENTE. Seres sin corazón y muchas veces sin escrúpulos. Sociedad cargada de complejos que necesita de crueldades para sentirse bien. Jugar a ver quién gana en una GUERRA como si de playmobil se trataran los miles y miles de ciudadanos a los que manejan como marionetas. Tomar decisiones sin tener en cuenta los sentimientos, el corazón, la conciencia…

Qué pena aquel niño pequeño, al que le cuentan todas esas fantasías, que sueña y muestra su radiante sonrisa… ¿Se han preguntado alguna vez por qué a un adulto le fascina tanto la SONRISA de un niño? Porque ese adulto se olvidó de sonreír así, perdió la ilusión y dejo que el color se fuera de su vida. Abandonó la alegría por cosas como un aburrido trabajo de oficina, que hace que su vida se base en una mera RUTINA gris de la que no podemos salirnos. Porque eso es lo que nos han enseñado, que así es como TODO debe ser. Nada puede salirse de ese orden, ese equilibrio sombrío y cuadriculado.

Pobre niño que corrió la aventura de SOÑAR, y de pensar que las metas podían alcanzarse, y que la vida podía ser de color rosa. Pobre niño ingenuo que según va creciendo va perdiendo su ilusión. Pobre niño que no sabrá asimilar ese choque, ese chasco cuando descubra que las cosas no son así. Pobre niño que en vez de ASIMILAR que la vida no es de color de rosa y seguir luchando por sus sueños para que su vida no pierda el color; terminará siendo, simplemente, un borrego más…Un adulto gris que tan sólo sigue una rutina. Rutina sin COLOR. Rutina sin ILUSIÓN. Rutina sin FELICIDAD.

martes, 3 de abril de 2012

Bienvenidos a mi cabeza

Los pensamientos profundos probablemente son los que más verdades suelen decir, pero sin embargo son los que menos salen a la luz. Tal vez yo piense demasiadas cosas, y por eso se me atorollan... Mi solución siempre ha sido escribirlos. Ahora, se han convertido en tantos y expresan tantas cosas que ya no sólo necesitan escribirse sino que también necesitan ser leídos. Bienvenidos a mi loca cabeza.